La brujula

A veces nos sentimos muy seguros de haber hecho lo correcto, acabamos con aquello que dejó de existir mucho antes de que dijéramos adiós, y según nosotros ahora es cosa de darle la bienvenida a lo nuevo con los brazos abiertos, pero por donde comenzar cuando perdimos la brújula una vez mas?.

Cuando se pierde la brújula uno puede terminar caminando en circulos en el final o en el principio como se quiera ver.

Todos perdemos la brújula de vez en cuando, el problema es que cuando insistimos en que vamos en la dirección correcta, vemos que hay un loco en sentido contrario, en la autopista.

Pero tarde o temprano alguien nos abre los ojos y nos dice “te equivocaste de rumbo” y a uno no le queda más remedio que agradecer esas palabras por muy lejos que nos encontremos de nuestra meta.